Editorial
Esta es nuestra última edición ante de las elecciones del próximo 5 de noviembre y por lo tanto la única posibilidad que nos queda de resaltar la importancia de votar, nadie debe quedarse sin votar. Si tienes el derecho, también tienes la obligación de cumplir y opinar sobre el camino que tomará este país en los años venideros.
Siempre me ha resultado confuso la medida que hacen los analistas sobre el papel que la recaudación de fondos tiene sobre la voluntad e intención del voto del ciudadanos. Es tanta la importancia la que le dan a esta categoría, que parece más una subasta que una verdadera elección libre de candidatos.
Ya las cifras están por los billones y en el último mes la candidata demócrata ha recaudado cifras que han sorprendido incluso a los miembros de su equipo, superando 2 a 1 a su contrincante. Pero eso no implica que se le dé por ganadora. Tomemos en cuenta que la campaña para presidente de Kamala Harris y la recaudación de dinero solo empezó en julio, luego de la renuncia esperada de Joe Biden, y del 21 de julio a nuestros días, superó el billón de verdes.
Como un detalle interesante, el Times informa que la recaudación de mil millones de dólares de Harris probablemente sea la más rápida que un candidato presidencial haya alcanzado la marca de las diez cifras. También señala que, si bien Biden y Trump recaudaron más de mil millones de dólares con sus partidos nacionales en 2020, lo hicieron durante un período de tiempo mucho más largo. Fuentes anónimas citadas por el Times dijeron que Harris recaudó mil millones de dólares en menos de 80 días.
Debemos recordar que participar en las elecciones no solo es votar, también lo es participar como voluntario en las campañas, atender llamadas, tocar puertas, enviar mensajes, etc., además, por supuesto de contribuir con la cartera para que el mensaje del candidato llegue a más gente y mover la intención de voto.
La indecisión en este momento no debería existir.
En realidad, me parece banal la información de que los latinos están indecisos en estas próximas elecciones cuando el candidato que perdió las elecciones anteriores promete una política de deportación masiva nunca vista en la historia de este país, al tempo que acusa a los inmigrantes de los grandes males y problemas que hoy en día se viven en este país.
La verdad es que hay que estar ciego o querer tapar el sol con un dedo para pensar que el caballero con peluquín tiene algo que ofrecer a la clase media y a los latinos y otras minorías. Por más que seamos minoría, el voto latino tiene la facultad de decidir el rumbo. De hecho, según la UCLA Latino Policy & Politics Institute, en 2024, los votantes latinos tendrán el poder de decidir la próxima elección presidencial y qué partido controlará el Congreso. Con un crecimiento de casi 4 millones de votantes elegibles y representando la mitad del crecimiento total de votantes elegibles desde 2020, el impacto potencial de los latinos en las elecciones es más significativo que nunca.
Está dicho, que no quede nadie sin votar.
Editorial
This is our last edition before the elections on November 5, and therefore, it is the only way we have left to highlight the importance of voting. Everyone should make sure to vote. If you have the right, you also must comply and give your opinion on the path this country will take in the coming years.
I have always found confusing the way analysts measure the role that fundraising has in the will and intention of the citizens’ votes. They give so much importance to this category that it seems more like an auction than a truly free election of candidates.
The figures are already in the billions, and in the last month, the Democratic candidate has raised figures that have surprised even the members of her team, surpassing her opponent 2 to 1. But that does not mean that she should be considered the winner. Let us consider that Kamala Harris’ campaign for president and fundraising only began in July, after the expected resignation of Joe Biden, and from July 21 to the present day, they have exceeded one billion dollars.
In a noteworthy detail, according to the Times, Harris’ billion-dollar fundraising achievement likely represents the quickest a presidential candidate has reached the ten-figure milestone. The report highlights that although both Biden and Trump raised over $1 billion with their national parties in 2020, they did so over a significantly longer duration. Anonymous sources referenced by the Times indicated that Harris accomplished this feat in under 80 days.
We must remember that participating in elections is not only about voting; it is also about volunteering in campaigns, answering calls, knocking on doors, sending messages, etc., in addition to, of course, contributing with one’s wallet so that the candidate’s message reaches more people and moves the voting intention.
There should not be any indecisiveness at this time.
In reality, the information that Latinos are undecided in these next elections seems banal to me when the candidate who lost the previous elections promises a massive deportation policy never seen before in the history of this country while blaming immigrants for the great evils and problems that are experienced in this country today.
The truth is that you have to be blind or want to hide the sun with a finger to think that the gentleman with a toupee has something to offer the middle class, the Latinos, and other minorities. Even though we are a minority, the Latino vote has the power to decide the course. According to the UCLA Latino Policy & Politics Institute, Latino voters will play a crucial role in determining the outcome of the 2024 presidential election and which party will control Congress. With nearly 4 million new eligible voters starting in 2020, Latinos now account for half of the overall growth in eligible voters, making their potential influence on elections more significant than ever. As previously said, everyone should make sure to vote.